Hace al menos una década, cuando las tasas de la enfermedad renal crónica (ERC) comenzaron a aumentar en comunidades agrícolas pobres de Centroamérica y otras partes del mundo, nadie hubiera pensado en los estragos que ha causado desde entonces lo que parece ser una nueva forma de nefropatía. Es una epidemia que en El Salvador ha catapultado la enfermedad renal en etapa terminal al tercer lugar entre las causas de mortalidad hospitalaria y al primer lugar entre los hombres.
Aunque ha sido denominada alternativamente ERC de causas no tradicionales, ERC de etiología indeterminada, nefropatía agrícola, nefropatía crónica agroquímica, nefropatía epidémica mesoamericana y ERC de etiología desconocida, los efectos de esta enfermedad son los mismos y su caracterización es similar en los países donde ha emergido. Esta ERC ha sido más frecuentemente descrita de manera histopatológica como nefritis tubulointersticial crónica y se ha estudiado hasta ahora en El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, México, Sri Lanka, Egipto y la India. Preferimos llamarla ERC de etiología no precisada (ERCnp), ya que los hallazgos de investigaciones iniciales señalan causas multifactoriales en casi todos los casos.
Según la OMS, la cobertura universal de salud (CUS) garantiza que todas las personas puedan utilizar los servicios de salud que necesiten sin penurias financieras. Hoy día, esta cobertura constituye un objetivo primordial de la OMS y también de buen número de gobiernos del mundo. Indudablemente, es imprescindible para los pueblos, y sobre todo, para las poblaciones más vulnerables, tanto del Norte como del Sur.
Así que el pensamiento salubrista mundial ha evolucionado del qué hasta el cómo…obligando a todos a salir en busca de experiencias concretas que puedan brindar información y acelerar el proceso único en cada país hacia este objetivo común.
En esta dirección, numerosos países latinoamericanos han implementado reformas extensivas de salud —a menudo conjuntamente con transformaciones estructurales y sociales más amplias— cuyo fin declarado ha sido mejorar el acceso a la salud y la protección financiera, incrementar la eficiencia de los servicios médicos y reducir las inequidades. Las estrategias escogidas para lograr estas metas han sido diversas —tanto entre países como en diferentes momentos dentro de un mismo país— abarcando desde un incremento del papel del Estado hasta una ampliación de la competencia de mercado y complejos enfoques mixtos, con mayores o menores resultados.
Después de décadas de reformas en salud, las lecciones aprendidas de América Latina constituyen un sólido,aunque poco divulgado, conjunto de conocimientos particularmente pertinente para los países de ingresos bajos y medios en el mundo entero y sus esfuerzos hacia la cobertura universal de salud. En Octubre 2014, la revista The Lancet publicó una Serie especial que, por primera vez en una sola publicación, intentó analizar y resumir estas experiencias para los lectores de habla inglesa.
A la vez, una colaboración entre The Lancet y nuestra revista ha hecho posible este suplemento de MEDICC Review para los lectores de habla hispana, ofreciéndoles el fruto del estudio, análisis y reflexión realizados por numerosos autores de la región y fuera de ella, sobre los caminos seguidos en América Latina para lograr la CUS. Agradecemos especialmente a Richard Horton y Pam Das de The Lancet por su compañerismo y su dedicación a la equidad.
Esperamos que esta edición en español amplíe la divulgación de las lecciones aprendidas, llegando a las manos de aquellos profesionales y trabajadores de la salud en las zonas más pobres y apartadas de las Américas y otras latitudes, quienes comparten una sola trinchera, desde la cual contribuyen con sus esfuerzos a lograr la cobertura universal de salud y abrir así el camino hacia la equidad en salud.
Agradecemos a la Fundación Rockefeller y a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe por el apoyo financiero que hizo posible la Serie, incluyendo esta edición en español publicada por MEDICC Review, y a la Organización Panamericana de la Salud por hacer posible la impresión de este suplemento.
Los Editores
La brecha en salud entre los países industrializados y los países en desarrollo se amplía, a pesar de esfuerzos realizados en el marco de los Objetivos del Desarrollo del Milenio. El digital divide aparente en las publicaciones científicas es reflejo de la todavía insuficiente atención a las enfermedades que atentan contra la salud de millones de personas en los países pobres, y la aún menor atención a la salud poblacional, los determinantes sociales y programas intersectoriales, la aplicación de nuevos productos desarrollados en los mismos países afectados, y a la cooperación Sur–Sur.